26 de octubre de 2010

Conexiones.

Existe una sensación superior a estar, observar, meditar, especular, abstraerse....; con tal pasividad coexite un acervo cultural y consuetudinario, que nos invita perpetuamente a actuar, a proceder más allá de nuestra individualidad, nos incita instintivamente a socializar, es un paso inherente al ser humano.... ¿siempre?, ¿siempre somos sociales? ¿por esencia?, ¿en serio?, ¿todos?.....

A veces las personas no conectan, en otras ocasiones son "torpes" interactuando, otras personas no lo necesitan, o quizás si pero de "otro modo", distinto al que nos han obligado a creer; que no es más que el estándar, el común, el "acostumbrado", el esperado.

Todos hemos sentido en mayor o menor medida una soledad buscada, un aislamiento forzado, un abandono doloroso, un rechazo, un agravio injustificado, ¿cómo lo hemos superado?, algunos soportando el estigma y haciéndole un hueco en el olvido que siempre anda cicatrizando; otros expulsándolo a gritos, llantos ahogados a través de un teléfono confidente que no juzga, ni aconseja, sólo alienta, empuja y achica la pena....; los demás quizás no saben como expresar la rabia, la frustración la acrecentan, el fiasco se engrosa, y se enfrascan en su interior para enajenarse como un mal remedio, como una defectuosa reparación, y se "largan", desconectan para continuar.

Pero todos estamos conectados, unos a otros, los débiles, los fuertes, los padres, los hijos, los maestros, los alumnos, los políticos, los ciudadanos....; todos necesitamos el agua, el aire, el calor y el frío invierno, con distintas medidas y en desiguales ocasiones, al igual que demandamos la alegría tras la tristeza, la calma tras la tempestad, la sanación tras la enfermedad; y así aunque estemos rígidamente predispuestos a pensar que somos sociales por naturaleza, la realidad es que sabemos que un hijo, un vecino, un primo, un compañero, un amigo, o simplemente un conocido no es capaz de socializar estereotipadamente, y aún así pertenece a nuestra naturaleza.

 "A veces buscaba en tí lo que es imposible cariño, pero ya no lo hago, y lo hacía para que no te pudieran hacer daño vida mía, más luego recapacité y comprobé que a todos nos lo hacen (en mayor o en menor medida), y la solución está como siempre en la comprensión, en la aceptación y en el respeto al ser humano. Tu no fallas, al no defenderte, aún no tienes la maldad suficiente, todo llega, todo llega."


5 comentarios:

Fiaris dijo...

Esta canción es una de mis preferidas,cariños

Paqui dijo...

Mucho me han gustado tus letras. Me ha sentado muy bien este post, es un reflejo de tantos sentimientos, de impotencias, injusticias y tormentos que acompañan a veces nuestros días y nuestros miedos. Supongo que hay que aprender a convivir con el dolor, con el rechazo, con los pequeños abandonos. Como sabes, hace mucho que escucho a Ismael Serrano. Una de mis canciones favoritas es "Principio de Incertidumbre", y viene a decir algo así "Puede que todo siga igual, también puede que no sea así"... Algo pasa y puede que todo cambie, y aquí está el principio de incertidumbre. Este Principio nos acompaña siempre y forma parte de nuestras vidas. Por favor, no dejes de escribir, tu blog también forma parte de la vida de muchas personas.

María del Mar Bernal dijo...

Quererte es fácil, no por un vínculo de sangre ni genético, no, no, no es nada de eso........, quererte es lo más natural que se le antoja a mi ser; podemos convivir con esa incertidumbre pero necesitamos mejorar siempre. Te quiero Paqui.

Fiaris, quizás te guste porque has aprendido a luchar en la vida, ¿me equivoco?, es de nuestras preferidas......... besitos.

Pakiba dijo...

Preciosa canción Maria del Mar.
La vida es una pura lucha que no podemos abandonar jamás. Luchar y amarnos para vivir .

Mil besos con cariño.

Princesa115 dijo...

No había escuchado la canción antes, pero tiene una letra bonita y para pensar.
La vida, como dice Pakiba, es continua lucha, siempre luchando por algo, por alguien...
Cada uno, pienso, tiene maneras diferentes de salir de una pesadilla de esas que la vida nos impone, unos socializándose, otros enclaustrándose...depende de las personas, de la forma de ver la realidad, de vivir.
A mi me cuesta trabajo callar, prefiero un teléfono confidente o una mano amiga.

Besos