3 de marzo de 2011

Despacito por favor

Hoy me detení en mí; la compañía del aire que su voz imploraba que le hablara despacito, despacito mami por favor, que no te entiendo si hablas tan rápido.

Hoy me ví tan pequeña, tal cuál era, dispersaba mi atención hacia un punto más claro que la explicación de mi profesora Fuensanta. La ventana ofrecía una luz más relajada, menos ágil que su vozarrón, más plácida.

Recuerdo que me suspendió Lenguaje, con mis pocos recursos ante ella, !miedo me daba! le pedí un por qué. Ella, tras un "puedes dar más de tí" decía que me ausentaba en la luna y que allí hacía lo que me daba la gana. Mi hermano mayor, Juan Lorenzo se convirtió en profesor improvisado durante todas las navidades; yo sólo le pedía a los Reyes aprobar mi exámen.

Lo aprobé y no aprobó mi empeño, no comentó nada y yo necesité su beneplácito. Era chapada a la antigua, aquello no debía venir en su programación diaria.

Al acabar la EGB, me besó y me alzó como su mejor alumna en aquella asignatura. !Llegó tan tarde la recompensa!. No hubiese estado mal un aliento, dosificado.

Cuando no veo más que el dolor o  alegría, cuando los temores no se mezclan con lo conseguido, le suelo reprochar mi obstinación por el blanco o el negro, el norte o el sur, como si no existiese nada en medio.

Quizás ni sea realmente la responsable, pero como dirían mis niñas !alguien tiene la culpa y no soy yo!

6 comentarios:

Pakiba dijo...

Alguien tiene la cupa y no soy yo!!, que bonita frase dicen tus niñas y cuanta razón si antes nos hubiesen dado un aliciente más generoso.

El Drac dijo...

Lo que pasa es que los adultos muchas veces no tenemos laq suficiente capacidad para enseñar a un niño: no somos perfectos y hacemos lo que podemos. Algo similar le sucedió a mi esposa con mi hijita, sucede que mi hijita tenía el bolo alimenticio demasiado tiempo en la boca y mi esposa paraba renegando con ella por esto; un día se quejó con su mamá diciendo:
¡ay por qué esta chiquita será así!
A lo que su mamá respondió:
¡Será igualita que tú...!!

Un fuerte abrazo

Fiaris dijo...

El ejemplo que pone el amigo Drac son cosas que suelo decirle a mis hijas cuando se quejan de mis nietos.
Abrazo amiga.

belijerez dijo...

la culpa??????? nunca, en todo caso de quién es la responsabilidad? queda mejor verdad?.

dicen que nuestro cerebro es como una grabadora, aunque yo quisiera que sólo reprodujese lo positivo, lo alegre, aquello nos da vitalidad, vamos que fuera siempre fiesta. uff que ganas de oir buenas noticias tengo.

besitos guapetona.

concha dijo...

Los profes son tan importantes para los niños......su puerta de entrada al conocimiento y una parte muy importante de su autoestima.
Marcos adora a un profe de lengua del insti, el típico tío carismático que se lleva a todos los chavales detrás como el flautista de Hamelín, sabe ganárselos a todos y con él trabajan como chinos, y no se quejan....una joya, encima dice mi madre ( que le conoció un día en teatro ) que es muy guapo...

Besitos

Anónimo dijo...

Yo tb estudié en tu colegio,y aunque Fuensanta nunca me dio clases. Ese no fue un impedimento para tenerle un miedo atroz ¿Quién no temía a esa mujer? Decirle a un niño que aquella iba a ser su profesora, era como decirle que ibas a llamar al coco.
Creo que ya está jubilada, pero la solia ver bastante, porque tiene a su nieto en argantonio(nuestro eterno enemigo jajajaja)
Debería de haber tenido más en cuenta lo mucho que puede influenciar en un niño pequeño las actitudes u opiniones de sus profesores.